Al final del trimestre pasado estuvimos hablando entre tod@s sobre los resultados de nuestro trabajo, cómo había ido el proyecto y qué cosas podríamos mejorar.
Hablamos muchas cosas, pero hubo algo en lo que tod@s coincidimos: nuestro nivel de ruido es demasiado alto tanto cuando trabajamos como cuando jugamos. Acordamos mejorar ese punto y para eso teníamos que estudiar el asunto a fondo.
Primero analizamos la situación:
HABLAMOS Y GRITAMOS DEMASIADO
Después debatimos varias propuestas hasta elegir la más adecuada:
PONER UNA ALARMA CON SONIDO Y LUCES
Finalmente establecimos la hipótesis de lo que pasaría si adoptásemos esa solución:
ESTAREMOS MÁS CALLADOS.
Nosotros hicimos nuestra parte, así que ahora tocaba esperar a que nuestra solución llegase a clase, y hoy por fin ha llegado.
¡HEMOS ESTRENADO NUESTRO SEMÁFORO DEL NIVEL DE RUIDO!